miércoles, 28 de marzo de 2012

Corinne Bailey Rae


Hoy quiero presentaros una cantante y compositora inglesa, que desde sus comienzos alcanzo los números uno. Suele hacer desde indie pop hasta jazz o soul. Su estilo te traslada a los blues de Billy Holiday o de Nina Simone, y posee una voz grácil, rica en matices, que te transmite una sensación de bienestar.
A continuación podéis escuchar su cover del tema Munich, original de la banda Editors

martes, 27 de marzo de 2012

RÉQUIEM DE MOZART

Hoy hablaré del réquiem de mozart y así aprovecho primero para promocionar el concierto de este viernes 30 de marzo en el auditorio El Batel y segundo para ayudar a quien aun creen que lo narrado en la película "Amadeus" el del todo cierto




En junio de 1791, Mozart ofreció en Viena uno de sus últimos conciertos públicos; tocó el Concierto para piano n.º 27 (KV 595). Su último hijo, Franz Xaver Wolfgang, nació el 26 de julio.
Pocos días antes se presentó en su casa un desconocido, vestido de gris, que rehusó identificarse y que encargó a Mozart la composición de un réquiem. Le dio un adelanto y quedaron en que regresaría en un mes. Pero el compositor fue llamado desde Praga para escribir la ópera La clemencia de Tito, para festejar la coronación de Leopoldo II.
Cuando subía con su esposa al carruaje que los llevaría a esa ciudad, el desconocido se presentó otra vez, preguntando por su encargo. Esto sobrecogió al compositor.
Más tarde se supo que aquel sombrío personaje (al parecer, llamado Franz Anton Leitgeb) era un enviado del conde Franz von Walsegg, músico aficionado y cuya esposa había fallecido. El viudo deseaba que Mozart compusiese la misa de réquiem para los funerales de su mujer, pero quería hacer creer a los demás que la obra era suya y por eso permanecía en el anonimato.
Según la leyenda, Mozart, obsesionado con la idea de la muerte, desde la de su padre, debilitado por la fatiga y la enfermedad, muy sensible a lo sobrenatural por su vinculación con la francmasonería e impresionado por el aspecto del enviado, terminó por creer que éste era un mensajero del Destino y que el réquiem que iba a componer sería para su propio funeral.
Mozart, al morir, consiguió terminar tan solo tres secciones con el coro y órgano completo: Introitus, Kyrie y Dies Irae. Del resto de la Secuencia dejó las partes instrumentales, el coro, voces solistas y el cifrado del bajo y órgano incompletos, además de anotaciones para su discípulo Franz Xaver Süssmayr. También había indicaciones instrumentales y corales en el Domine Jesu y en el Agnus Dei. No había dejado nada escrito para el Sanctus ni el Communio. Aunque en un principio Constanze, su viuda, pidió al músico de la Corte Joseph Leopold Eybler que terminase el Réquiem, fue su discípulo Süssmayer quien lo acabó (siguiendo las directrices de Mozart), completando las partes faltantes de la instrumentación, agregando música en donde faltaba y componiendo íntegramente el Sanctus. Para el Communio, simplemente utilizó los temas del Introito y el Kyrie, a manera de reexposición, para darle cierta coherencia a la obra.
Una de las principales influencias de esta obra puede hallarse en el Réquiem de Michael Haydn compuesto en el año 1771 para la muerte del arzobispo de Salzburgo S. C. Schrattenbach.
Aunque al parecer se tocaron extractos del Réquiem en una misa en memoria de Mozart celebrada el 10 de diciembre de 1791, el estreno de la obra completa se produjo en Viena el 2 de enero de 1793 en un concierto en beneficio de la viuda del músico austríaco (Constanze Weber). Fue interpretado de nuevo el 14 de diciembre de 1793, durante la misa que conmemoraba la muerte de la esposa del conde Walsegg y bajo la dirección del propio conde.
Después de esta interpretación, el conde Walsseg realizó una reducción para quinteto de cuerda, pero la obra no volvió a interpretarse bajo su patrocinio.




sábado, 24 de marzo de 2012

LAS TRES QUINTAS: TCHAIKOVSKY



Y llegamos a la última de mis tres sinfonías favoritas. La quinta de Tchaikovsky

Piotr Illich Tchaikovsky (Votinsk, 1840 – San Petersburgo, 1893) fue un “romántico en el crepúsculo del romanticismo”, en palabras de Javier Alfaya. Pocos compositores han presentado una lucha vital interior tan extrema. Su obra es, en esencia, humana, y refleja su personalidad desigual, compleja, desgarrada pero magnificada por el genio. La autenticidad de su mensaje hace que nos aprieten las entrañas y a veces nos avergonzamos de ello. Por esta razón, la crítica lo ha tachado en ocasiones de excesivo sentimentalismo y de un marcado formalismo germanizante frente al genuino grupo de “los poderosos Cinco” (Balakirev, Borodin, Rimsky-Korsakoff, Cui y Mussorgsky). Stravinsky, en su Poética Musical, hablaba del “nacionalismo eslavófilo” de dicho foco y, por otra parte, del talento romántico, el gusto por los contemporáneos franceses y la absorción de la depurada técnica alemana de Tchaikovsky. No obstante, el líder de la facción cosmopolita o “europea” de la música rusa del momento, fue permeable a la influencia de la “tendencia opuesta” (sobre todo, de Balakirev), del folklore y de las modas musicales (música de danza y de salón). En este sentido, ha sido considerado por expertos como L. Kearney, como un puente entre dos orillas: entre Este y Oeste, nacionalismo y cosmopolitismo, tradición e innovación, ternura y agresividad, incluso entre masculinidad y feminidad.

En la primavera de 1888, tras una de sus giras europeas más importantes, en la que conoció a Brahms y a Grieg y escuchó una sinfonía del joven R. Strauss (que calificó de insincera y antinatural), el compositor decide apartarse del “mundanal ruido”. Se ha apuntado que Tchaikovsky sufría de cierta neurastenia crónica que le impedía disfrutar, e incluso, digerir los festejos y ovaciones que pocos compositores habían conocido en vida. Por ello, se instala en Frolovskoie, en pleno campo, lugar que lo seduce por completo: “Me he enamorado absolutamente de Frolovskoie; esta comarca me parece el cielo en la tierra”. En esta nueva residencia recobra la inspiración y comienza a exprimir una nueva sinfonía de su “cerebro embotado”. Hacia el 30 de mayo, ya estaba metido de lleno en la composición de la 5ª, tarea que combina con la composición de la obertura Hamlet. A principios de Agosto comenzó la orquestación que concluyó en unas tres semanas, con lo que quería demostrar al mundo que “no había muerto”. Ya anunciamos que la correspondencia del compositor es riquísima y, gracias a ella, podemos inferir los cambios continuos en la valoración de su propia obra como reflejo de la personalidad insegura y fluctuante del músico. Así, el 19 de agosto escribía a von Meck: “Ahora que la sinfonía está terminada puedo decir que, a Dios gracias, no es peor que las otras. ¡Esta certeza me es agradable!”. Poco después, las primeras pruebas hacían furor entre sus amigos de Moscú, sobre todo en Taneiev, como se deduce de sus cartas: “Mis amigos están en éxtasis por lo de la sinfonía, pero habrá que ver cómo la reciben el público y el mundo musical de San Petersburgo”.

Como si de un vidente se tratase, no erró en sus pronósticos. La obra fue estrenada en la Sociedad Filarmónica de San Petersburgo, el 5 de Noviembre del mismo año, junto al Concierto nº2 para piano, bajo la dirección del propio Tchaikovsky. La crítica recibió fríamente la sinfonía. Ivánov encontraba la Quinta inferior a la Segunda y la Cuarta, y con reminiscencias de Francesca da Rímini; calificaba de brillante la orquestación, pero no estaba de acuerdo en el uso excesivo del los vientos. Estos comentarios influyeron en la consideración de la partitura por parte de su autor, quien comenzaba a preguntarse si estaba en el comienzo del fin. Dicha conciencia de fracaso le producía gran angustia: “La sinfonía se ha vuelto demasiado florida, grandiosa, insincera y prolija; muy desagradable, en resumen”. Sin embargo, pocos meses después, ocurrió un hecho que devolvió el optimismo a Tchaikovsky. En Marzo de 1889, viaja a Hamburgo para dirigir, entre otras obras, la nº5, que había dedicado a algunos críticos de dicha ciudad. Allí coincidió con Brahms, quien amablemente asistió al primer ensayo. Tras su lectura, la obra fue bien acogida por la orquesta y por el compositor alemán, salvo el último movimiento. El exitoso estreno tuvo lugar el 15 de Marzo y, a partir de esta fecha, la sinfonía volvió a gustar a su autor y comenzó a cautivar al público. En Nueva York, a principios de la década de los noventa, afirmaría: “Parece como si yo fuera diez veces más conocido en Norteamérica que en Europa. Hay algunas piezas mías que siguen sin ser conocidas en Moscú; aquí las tocan varias veces por temporada y escriben artículos enteros sobre ellos. Han tocado la Quinta Sinfonía en los dos años pasados, ¿no es divertido? En los ensayos los intérpretes me brindaron una acogida entusiasta”

La Sinfonía nº5 en mi menor se divide en cuatro movimientos (Adagio-Allegro con anima; Andante cantabile con alcuna licenza; Allegro moderato; Andante maestoso- Allegro vivace) en los que aparece, bajo variadas formas, una idea directriz. Pese a no basarse en un programa detallado, continúa en la línea de la nº4, basada también en el “mal de los tristes”, el Destino. La instrumentación adoptada para llevar a cabo estos propósitos es la usual: tres flautas, resto de maderas a dos, cuatro trompas, dos trompetas, tres trombones, tuba, timbales y cuerda.

En conclusión, esta obra nos asombra por el dinamismo de la escritura orquestal que es llevado al extremo mediante la construcción de zonas de clímax extendidas hasta un punto que roza la histeria. La manipulación de colores tonales oscuros, por otro lado, consigue crear la típica atmósfera de melancolía de las sinfonías tchaikovskianas. Sea como fuere, el final queda abierto, y pide a gritos una interpretación individual y una escucha activa, convirtiéndose la música en “un instrumento de comunicación de los deseos y las esperanzas humanas”. Si durante algún tiempo el arte de Tchaikovsky fue rechazado en nombre de la modernidad, hoy se encuentra plenamente justificado en los senderos posmodernos donde el sentimiento se revaloriza frente a la razón.


viernes, 23 de marzo de 2012

LAS TRES QUINTAS: BEETHOVEN


La Quinta Sinfonía tuvo una larga gestación. Los primeros esbozos datan de 1804 tras haber acabado la Tercera Sinfonía. Sin embargo, Beethoven debía interrumpir su trabajo en la Quinta para preparar otras composiciones, incluyendo la primera versión de Fidelio, la Sonata para piano Appassionata, los cuartetos de cuerdas Rasumovsky Op. 59, el Concierto para violín, el Concierto para piano n.º 4, la Cuarta Sinfonía y la Misa en do mayor. La preparación final de la Quinta Sinfonía, que tuvo lugar entre 1807 y 1808, fue llevada en paralelo con la Sexta Sinfonía, que fueron estrenadas en el mismo concierto.
Cuando Beethoven la compuso ya estaba llegando a los 40 años, su vida personal estaba marcada por la angustia que le causaba el aumento de su sordera; pese a esto, había entrado ya en un imparable proceso de “furia creativa”. Europa estaba marcada decisivamente por las guerras napoleónicas, la agitación política en Austria y la ocupación de Viena por las tropas de Napoleón en 1805.


Estreno

La Sexta Sinfonía, Op. 68La obra fue estrenada el 22 de diciembre de 1808 en el Theater an der Wien en un monumental concierto de cuatro horas que consistía exclusivamente en estrenos de Beethoven, y que fue dirigido por el mismo Beethoven. Las dos sinfonías aparecieron en el programa nombradas al revés del orden por la cual las conocemos hoy: la Sexta fue la primera y la Quinta aparecidó en la segunda mitad. El programa fue:
  1. El aria Ah, perfido! Op. 65
  2. El Gloria de la Misa en do mayor Op. 86
  3. El Concierto para piano n.° 4 Op. 58 (tocado por el propio Beethoven)
  4. (pausa)
  5. La Quinta Sinfonía, Op. 67
  6. El Sanctus y el Benedictus de la misma misa
  7. Una improvisación para piano solo tocada por Beethoven
  8. La Fantasía coral, Op. 80

La sinfonía está orquestada para flautín (sólo en el cuarto movimiento), dos flautas, dos oboes, dos clarinetes en si  y do, dos fagotes, contrafagot (sólo en el cuarto movimiento), dos trompas en mi do, dos trompetas, tres trombones (alto, tenor y bajo, sólo en el cuarto movimiento), timbales (en sol y do) y cuerdas.
La sinfonía tiene una duración aproximada de 30 minutos y consta de cuatro movimientos:
  1. Allegro con brio
  2. Andante con moto
  3. Scherzo. Allegro
  4. Allegro


jueves, 22 de marzo de 2012

LAS TRES QUINTAS: MAHLER

Mis tres compositores sinfónicos favoritos son sin duda alguna Mahler, Tchaikovsky y Beethoven, y casualmente mi sinfonía favorita en los tres casos es la quinta. Por ello voy a hablaros las tres quintas. 
En este primer post trataremos a mahler y su sinfonía no 5 en do sostenido menor

Dado que Mahler trabajaba de Director de Orquesta, solo disponía de las vacaciones estivales para componer, por ello, dedicó los veranos de 1901 y 1902 para componerla (primer y tercer movimiento en 1901, el resto en 1902). En el año 1902 contrajo matrimonio con Alma Schindler, a quién le dedicó la obra,  estrenándola él mismo al piano.
Esta es la primera sinfonía de Mahler que no estuvo directa o indirectamente implicada con la voz humana (la segunda, tercera y cuarta usan voz/voces y la primera comparte material con dos lieder del ciclo Canciones de un Caminante) singularidad que hizo que la rutinas previamente establecidas con las cuatro anteriores resultaran totalmente inadecuadas para esta sinfonía, motivo por el cual Mahler nunca llegó a estar completamente satisfecho con la orquestación que revisó una y otra vez hasta su muerte.A este respecto, Alma declaró que a su esposo “… le fue imposible estar satisfecho con su trabajo e incluso llegó a exigir un acuerdo del editor parta que cualquier modificación de la sinfonía fuera incluída en las ediciones futuras y agregada a cualquier copia no vendida que estuviera ya impresa”.En una carta dirigida a su esposa, Mahler aseguraba: “el scherzo es un movimiento endemoniado que va a tener grandes problemas. Los directores lo tomarán demasiado rápido y harán con él tonterías (…) ¿Y el público que va a entender, que van a decir de esta música primigenia, de este mar de centelleantes rompientes que echa espuma, que ruge, que se enfurece…? Esta música no es de este tiempo. ¡Oh si pudiera dar el estreno de esta sinfonía 50 años después de mi muerte”.
La Quinta fue el primer intento de Mahler en la expresión puramente musical, sin la mediación programática de un texto previo que filosofara sobre el amor o la muerte. Se trata de una sinfonía más abstracta y, al mismo tiempo, más concisa que las anteriores. También es más contrapuntística que aquellas (más reposadas y construidas a partir de encuadres armónicos). Aquí, en la Quinta, las líneas melódicas son más básicas que los acordes y el impulso del ritmo pone de manifiesto a un Mahler que comienza a explorar la combinación simultánea de ideas independientes. Todo ello justifica su necesidad de hacer una orquestación con texturas transparentes que preservaran la claridad a pesar del gran tamaño de la orquesta. Al parecer, el compositor tuvo problemas importantes con esta necesidad de claridad y solo con el paso del tiempo llegó a comprender como lograrla. De ahí la necesidad de las repetidas revisiones.




     PRIMER MOVIMIENTO
Trauermarsch (Marcha Fúnebre)

Este primer movimiento está construido de una forma bastante simétrica: una marcha fúnebre interrumpida por dos tríos.La obra comienza con la doble exposición de una fanfarria (confiada en principio a las cuatro trompetas de la orquesta) y de un temamoderado seguido de una melodía nostálgica en la bemol. Al final la fanfarria se va disolviendo hacia el agudo (flauta).Tal parece que el movimiento sea, globalmente, una introducción a la obra (en realidad lo es) a diferencia con la Segunda Sinfonía con la que, a pesar de compartir una marcha fúnebre como inicio, en aquella el movimiento (Totenfeier) no solo es de mayor duración sino también más independiente hasta el extremo de haber sido concebido como una obra autónoma que aun hoy se interpreta en ocasiones como tal.



SEGUNDO MOVIMIENTO

En realidad podría ser considerado como un “segundo primer movimiento” destinado a romper la inmovilidad creada por la marcha fúnebre, y lo intenta agitándose (episodios en la menor) y retomando algunos episodios que apenas si habían sido expuestos en la marcha que le precede y que son tratados de nuevo de un modo más dinámico. Estos episodios, que van intercalándose en distintas tonalidades, terminan por imponerse creando una tensión acumulada que de repente se libera en un coral en re mayor, expuesto por todos los instrumentos de viento, que se convierte en un bastión avanzado de los movimientos tecero y, sobre todo, quinto.
Finalmente el coral queda como una visión y desaparece como un eco desencarnado de los conflictos precedentes para concluir primero en re menor y después en la menor.



TERCER MOVIMIENTO

Se trata de un vasto scherzo (es la primera vez que Mahler utiliza de forma explícita esta denominación) en re mayor que, a diferencia de lo que ocurre en los scherzos clásicos beethoveninanos, aquí son los ländler* y el vals quienes dominan e invaden a este movimiento, el más largo de la sinfonía.
(*) El ländler es una danza folclórica en compás de 3/4 que fue muy popular en Austria y el sur de Alemania a finales del siglo XVIII. Se le considera un precursor del vals y fue utilizado por Mahler en varias de sus sinfonía como sustitución del scherzo. En este movimiento la trompa solista (corno obbligato) adquiere tal importancia que hoy en día muchos directores lo colocan al frente de la orquesta.  



CUARTO MOVIMIENTO

A la manera de Cuarto Movimiento, y como introducción al Quinto, encontramos el célebre Adagietto en fa mayor para cuerda sola que recuerda a una hipotética versión instrumental del Wunderhorn lied titulado Lob des hoben Verstandes.
No fue casual ni arbitrario que Visconti introdujera este adagietto como banda sonora de su película Muerte en Venecia basada en la novela homónima de Thomas Mann. Cuando Mann escribió la novela en 1911 lo hizo a raiz de la muerte de Gustav Mahler de quien era un profundo admirador. Thomas Mann estaba hospedado en el Hotel des Baines del Lido cuando conoció la noticia de la gravedad de Mahler, el mismo escenario que Visconti utilizó para la transcripción cinematográfica de la novela de Mann. A modo de homenaje, y en un intento de que no hubiesen dudas al respecto de su intención, el cineasta hizo que el protagonista de la novela pasase a ser músico en lugar de escritor como en la novela. La música de Mahler, y en especial el adagietto, se convierten en fondo de escena de los momentos más dramáticos y sublimes de la controvertida cinta en la que el director identifica demasiado al protagonista con la figura de Gustav Mahler, una libre versión de la novela de Mann que nos muestra a un Mahler que, en lo sustancial, para nada coincide con el real.


QUINTO MOVIMIENTO

El final de la sinfonía, en re mayor, es vacilante en su comienzo con un fagot citando al lied Wunderhornn al que antes hacíamos mención y al que sigue una especie de fuga que finalmente interrumpe el mismo coral que ya escuchamos en la conclusión del Segundo Movimiento y que aquí se muestra apoteósico.
A excepción del adagietto (por otra parte citado de una forma deformada en el final), la Quinta Sinfonía es la más agitada en el sentido “humano” y la más desenfrenada escrita por Mahler que, en relación a sus precedentes, crea un “retorno a aquí abajo, a la tierra, a lo humano” que la Sexta confirmará.

El arte del insulto

Bore Me ha elaborado una recopilación de frases (When insults had class - Sticking in the daggers) que demuestran que las palabras pueden ser más contundentes que una certera patada en los huevos. Ironía, sarcasmo, socarronería y mucha, mucha mala leche. 

He has all the virtues I dislike and none of the vices I admire. 

Él tiene todas las virtudes que aborrezco y ninguno de los vicios que admiro. 

Winston Churchill 




I have never killed a man, but I have read many obituaries with great pleasure. 

Nunca he matado a un hombre, pero he leído muchos obituarios con gran placer. 

Clarence Darrow 



He has never been known to use a word that might send a reader to the dictionary. 

Nunca ha sabido usar una palabra que podría enviar a un lector al diccionario. 

William Faulkner (acerca de Ernest Hemingway) 



Poor Faulkner. Does he really think big emotions come from big words? 

Pobre Faulkner. ¿Realmente piensa que las grandes emociones proceden de las grandes palabras? 

Ernest Hemingway 



Thank you for sending me a copy of your book; I’ll waste no time reading it. 

Gracias por mandarme una copia de tu libro; no desperdiciaré tiempo leyéndolo. 

Moses Hadas 



I’ve had a perfectly wonderful evening. But this wasn’t it. 

He tenido una tarde absolutamente maravillosa. Pero ésta no lo ha sido. 

Groucho Marx 



I didn’t attend the funeral, but I sent a nice letter saying I approved of it. 

No asistí al funeral, pero envié una carta agradable diciendo que lo aprobaba. 

Mark Twain 



He has no enemies, but is intensely disliked by his friends. 

Él no tiene enemigos, pero es intensamente aborrecido por sus amigos. 

Oscar Wilde 



I am enclosing two tickets to the first night of my new play, bring a friend… if you have one. 

Adjunto dos entradas para el estreno de mi nueva obra, trae un amigo… si tienes alguno. 

George Bernard Shaw a Winston Churchill 



Cannot possibly attend first night, will attend second… if there is one. 

Posiblemente no pueda asistir la primera noche, asistiré a la segunda… si hay. 

Respuesta de Winston Churchill 



I feel so miserable without you, it’s almost like having you here. 

Me siento tan miserable sin tí, es casi como si estuvieras aquí. 

Stephen Bishop 



He is a self-made man and worships his creator. 

Es un hombre hecho a si mismo y adora a su creador. 

John Bright 


I’ve just learned about his illness. Let’s hope it’s nothing trivial. 

Me acabo de enterar de su enfermedad. Esperemos que no sea nada trivial. 

Irvin S. Cobb 


He is not only dull himself, he is the cause of dullness in others. 

No sólo está deprimido, él es la causa de la depresión en otros. 

Samuel Johnson 



He had delusions of adequacy. 

Él tenía delirios de suficiencia. 

Walter Kerr 



There’s nothing wrong with you that reincarnation won’t cure. 

No hay nada malo en tí que la reencarnación no curará. 

Jack E. Leonard 



They never open their mouths without subtracting from the sum of human knowledge. 

Ellos nunca abren sus bocas sin restar de la suma del conocimiento humano. 

Thomas Brackett Reed 



He inherited some good instincts from his Quaker forebears, but by diligent hard work, he overcame them. 

Él heredó algunos instintos buenos de sus antepasados cuáqueros, pero con un minucioso trabajo duro, los superó. 


James Reston (acerca de Richard Nixon) 



He loves nature in spite of what it did to him. 

Él ama la naturaleza a pesar de lo que le hizo. 

Forrest Tucker 



Why do you sit there looking like an envelope without any address on it? 

¿Por qué te quedas ahí sentado mirando como un sobre sin dirección? 

Mark Twain 


His mother should have thrown him away and kept the stork. 

Su madre debería haberlo lanzado lejos y guardado la cigüeña. 

Mae West 


Some cause happiness wherever they go; others, whenever they go. 

Algunos causan felicidad dondequiera que van; otros, cuando se van. 

Oscar Wilde 



He uses statistics as a drunken man uses lamp-posts… for support rather than illumination. 

Él utiliza las estadísticas como un borracho utiliza las farolas … para apoyo antes que para iluminación. 

Andrew Lang (1844-1912) 



He has Van Gogh’s ear for music. 

Él tiene el oído de Van Gogh para la música. 

Billy Wilder

martes, 20 de marzo de 2012

Avec la garde montante

Mi movimiento favorito de una de mis óperas favoritas



Choeur des Gamins
Avec la garde montante
nous arrivons, nous voilà!
Sonne, trompette éclatante!
Ta ra ta ta ta ra ta ta.
Nous marchons, la tête haute
comme de petits soldats,
marquant, sans faire de faute,
(crié)
une, deux, marquant le pas.
Les épaules en arrière
et la poitrine en dehors,
les bras de cette manière,
tombant tout le long du corps.
Avec la garde montante
nous arrivons, nous voilà!
Sonne, trompette éclatante!
Ta ra ta ta ta ra ta ta.
Ta ra ta ta ra ta ta
Ta ra ta ta ra ta ta ta
Choeur 1
ta ra ta
Choeur 2
ta ra ta
Choeur 1
ta ra ta
Choeur 2
ta ra ta
Choeur 1
ta ra ra
Choeur
Ta ra ta ta ta
Ta ra ta ta ra ta ta
Ta ra ta ta ra ta ta ta
Choeur 1
ta ra ta
Choeur 2
ta ra ta
Choeur 1
ta ra ta
Choeur 2
ta ra ta
Choeur 1
ta ra ta
Choeur
Ta ra ta ta ta.
Nous marchons, la tête haute
comme de petits soldats,
marquant, sans faire de faute,
(crié)
une, deux, marquant le pas.
Les épaules en arrière
et la poitrine en dehors,
les bras de cette manière,
tombant tout le long du corps.
Nous arrivons! Nous voilà!
Ta ra ta ta ra ta ta
ra ta ta ta ta ra ta ta.

Gabriel Escudero



Hoy voy a hablar de quien para mí es uno de los mejores pianistas de nuestro país por no decir el mejor, y de los mejores jóvenes a nivel mundial. Estoy hablando por supuesto del cartagenero Gabriel Escudero Braquehais. Nació en 1982 es el seno de una familia de artistas, su hermano Lucas también estudió música, en la especialidad de piano y violín y es sobrino del famoso arquitecto Rafael Braquehais. Ya desde muy joven demostró ser un aventajado sobre los músicos de su misma edad. Ha estudiado con maestros de la talla de Eldar Nebolsin, Yefim Bronfman y Arkady Aronov, además de haber estudiado en las Manhattan School of Music y Mannes College de Nueva York. Ha ganado numerosos premios como el concurso nacional "Infanta Cristina", el "Ciutat de Manresa", el "Ciutat de Xativa".....
La primera vez que escuché a Gabriel fue en "petit comité" en un bar de la ciudad y he de decir que me dejó absorto pero no tiene ni punto de comparación con el día que por fin le escuché en una gran sala de conciertos como es el Auditorio de Murcia, donde interpretó el 4º concierto de Beethoven para piano y orquesta. Poseedor de una técnica depurada y una musicalidad exquisita, el artista logró comunicarse con el oyente de una manera casi inconsciente, sin dar la sensación de ningún tipo de esfuerzo, demostrando al espectador que él disfruta interpretando y que la música no solo se aprecia auditivamente.
Creo que no me equivoco al pronosticar que de Cartagena ha salido un futuro Horowitz. Espero que puedan disfrutar pronto de su música en directo. Anunciaré en este blog cualquier concierto suyo que se dé en la Región de Murcia, aunque dado que practicamente el 25% de mis lectores son estadounidenses, aviso que actulmente reside en Manhattan y que suele ofrecer recitales con cierta frecuencia.
De momento os dejo el siguiente link donde podréis disfrutar de una de las mejores versiones del segundo de Rachmaninov que jamás he escuchado, junto con  la "rapsodia española" de Liszt,  una sonata de Prokofiev y "la maja y el ruiseñor" de Granados.
http://www.ziborg.es/proarte_clasica/app/artistas/artistas.asp?id_categoria=11&id_artista=23&idioma=es

Además aquí tenéis un vídeo de la cadencia del primer movimiento del concierto no 4 para piano y orquesta de Beethoven.

lunes, 19 de marzo de 2012

hesse por Andy Warhol

A veces una imagen...


l ́elisir d ́amore: una furtiva lagrima


Quizás la mejor aria que jamas se haya compuesto



Una Furtiva lágrima
(Gaetano Donizetti)
Una furtiva lagrima
negli occhi suoi spuntò,
quelle festose giovani
invidiar sembrò.
Che più cercando io vo?
Che più cercando io vo?

M'ama, sì, m'ama, lo vedo, lo vedo!

Un solo istante i palpiti
del suo bel cor sentir!
I miei sospir confondere
per poco ai suoi sospir!
I palpiti, i palpiti sentir,
confondere i miei coi suoi sospir!

Cielo, si può morir...!
Di più non chiedo, non chiedo.
Ah! Cielo, si può, si può morir...!
Di più non chiedo, non chiedo.
Si può morir...
Si può morir d'amor!

Traducción
Una furtiva lágrima
en sus ojos despuntó,
a aquellas alegres jóvenes
envidiar pareció.
¿Qué más buscando voy?
¿Qué más buscando voy?

Me ama, sí, me ama, lo veo, lo veo.

¡Un solo instante los latidos
de su hermoso corazón sentir!
Mis suspiros confundir
por poco con sus suspiros.
Los latidos, los latidos sentir,
¡confundir los míos con sus suspiros!

¡Cielos, se puede morir...!
No pido más, no pido.
¡Ah! ¡Cielos, se puede, se puede morir...!
No pido más, no pido.
Se puede morir...
¡Se puede morir de amor!